protAgonizo es un monólogo escrito, dirigido e interpretado por Ester Bellver. Se estrenó en octubre del 2009 en Aretxabaleta (Guipuzkoa). En Madrid tuvo una gran acogida repleta de prórrogas y reposiciones. Saltó de una a otra sala alternativa (Montacargas, Triángulo y AZarte) manteniéndose tres años consecutivos en cartelera. En noviembre del 2011 se presentó en la sala Princesa del Teatro María Guerrero (Centro Dramático Nacional) donde también se prorrogaron sus actuaciones. Ha pasado por Palma de Mallorca, Ciudad Real, Segovia, Asturias, Murcia, Granada, varias ciudades del País Vasco, Cádiz, Barcelona, Valladolid, Sevilla, Palencia, Puertollano, Zaragoza, Albacete, Valencia, Zamora..., y en el ámbito internacional por Buenos Aires.

ESPECTÁCULO RECOMENDADO POR LA RED NACIONAL

domingo, 27 de junio de 2010

Sexto Triángulo

Hoy, 27 de junio, es nuestra sexta función en la Triángulo; tendría que haber sido la última representación en esta sala, o así fue pactado en un principio, pero nos han invitado a prorrogar dos domingos más: hasta el 11 de julio. No sólo eso, sino que también a volver tras el verano: el reestreno será el 12 de septiembre. Gracias Triángulo por dar escenario a estos humildes rombos de tiza caucasianos. La pintada retratada en la foto que aquí os planto, está hecha antes de ayer en la desembocadura de la calle Zurita con Argumosa, un cruce de caminos interesante ya que, una calle (Zurita) es en la que se encuentra el Teatro Triángulo y la otra (Argumosa) donde se encuentra el público con el que mayoritariamente estoy teniendo un contacto directo, bien repartiendo papelitos, pintando rombos o hablando con ellos de tú a tú.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, el domingo fui al teatro a ver ProtAgonizo. Quería felicitarte por esta obra que me parece tan "verdadera". En la calle Argumosa me repartiste un papelito, igual al de esas personas que venden mecheros por la voluntad. Cada vez que subo la calle Zurita con las compras hechas en el Carrefour, encuentro tus rombos, un jeroglífico que seguí hasta la butaca de la sala triángulo.
Un abrazo,
Noe

Rotura Producciones dijo...

De pequeña me gustaba mucho jugar a "las flechas". El juego consistía en ir dejando flechas pintadas a tiza (las tizas eran trozos de ladrillos rotos o de yeso procedentes de cascotes y restos de escombros que te encontrabas entre las malezas)que las amiguitas tenían que ir descubriendo como pistas que les llevaran al escondite donde, con el corazón a mil por hora, aguardabas a ser o no descubierta. Es el mismo juego que utilizo con el público de protAgonizo. ¡Me descubriste!